Cepillado y Uso del Hilo Dental con Frenillos
Usted sabe lo importante que es cepillarse los dientes y usar el hilo dental correctamente cuando tiene frenillos, ¿pero cuál es la mejor manera de hacerlo? Comencemos con las herramientas básicas para cepillarse: Puede usar un cepillo de cerdas suaves o un cepillo de dos niveles (los que tienen cerdas más cortas en el centro y cerdas más largas en los bordes). Si se usa de manera cuidadosa, el cepillo de dientes eléctrico también puede funcionar bien. Pero asegúrese de que el cepillo eléctrico esté en un nivel de potencia moderado, ¡y no permita que las vibraciones hagan que la parte posterior del cepillo toque los frenillos!
Debe cepillarse con una pasta de dientes con flúor al menos dos veces al día (preferiblemente después de las comidas), por un mínimo de dos minutos cada vez. Recuerde cepillar todas las superficies de los dientes: la parte anterior, la parte posterior y también las superficies de masticación. Sea especialmente minucioso al limpiar entre los cables y dientes, y entre los frenillos y encías: es allí donde pueden quedar atrapadas fácilmente partículas de comida.
Esta es una técnica de cepillado sugerida: Comenzando en la superficie anterior de los dientes, coloque las puntas de las cerdas contra los dientes y utilice movimientos circulares pequeños para limpiarlos suavemente. Para las áreas entre los frenillos y las encías, incline el cepillo hacia la línea de la encía (hacia abajo para los dientes inferiores, hacia arriba para los superiores) mientras continúa con los movimientos circulares. Luego, pase a las superficies de masticación de los dientes superiores e inferiores, con movimientos firmes hacia delante y atrás. Por último, cepille cuidadosamente las superficies posteriores de los dientes de la misma forma que cepilló las superficies anteriores.
Herramientas Especiales para Cepillarse
Si tiene dificultad para limpiar las superficies cercanas a los frenillos y los cables, existen herramientas especiales que pueden ser de ayuda. Una es el cepillo interdental. Este tiene un pequeño uni penacho que sobresale como en un limpiapipas. Úselo suavemente y con cuidado para limpiar los espacios pequeños debajo de los cables y alrededor de las bandas y los frenillos.
Otra herramienta de limpieza especial es el irrigador oral o "cepillo de agua a presión". Esta herramienta lanza un pequeño chorro de agua a presión hacia los dientes, lo cual puede ayudar a destrabar los trozos de comida que hayan quedado atrapados en los rincones. Aunque es fácil de usar, el irrigador oral no reemplaza al cepillo de dientes ni al hilo dental; pero cuando se utiliza en conjunto con técnicas de cepillado adecuadas e hilo dental pueden ser muy eficaz.
Aspectos Básicos del Uso del Hilo Dental
Para mantener sus dientes y encías limpios y saludables, debe usar hilo dental por lo menos una vez al día. ¿Pero cómo logra meter el hilo dental debajo del cable de alambre de los frenillos? No es tan difícil con la ayuda de un enhebrador de hilo dental. Utilizar esta herramienta es muy parecido a enhebrar una aguja: Debe pasar un extremo del hilo a través del enhebrador y luego empujar el enhebrador —llevando con este el extremo libre del hilo dental— por debajo del cable de los frenillos. Luego sujete el hilo dental de cada extremo y deslícelo hacia arriba y abajo sobre las caras de ambos dientes, y hasta debajo de las encías hasta escuchar un sonido rechinante. Por último, sáquelo y utilice una sección nueva de hilo para la siguiente área.
Revelación Completa
¿Alguna vez se ha preguntado qué tan eficaces son realmente sus técnicas de limpieza de dientes? Hay un método preciso para saberlo, que utiliza tintes vegetales especiales llamados "soluciones reveladoras" o "pastillas reveladoras". Mientras se disuelven en la boca, estos tintes resaltan la placa y los desechos de comida que el cepillado no eliminó. Entonces, usted puede eliminar fácilmente las áreas teñidas —y sabrá con certeza si sus métodos de higiene oral necesitan algún "retoque"—.
Mantener sus dientes y encías sanos hoy es una inversión para el futuro. Le permite obtener los mejores resultados de su tratamiento de ortodoncia, y es el punto de partida para una sonrisa más radiante que puede durarle toda la vida.